Ballenas piloto acompañan el viaje en barco por el golfo de California. En el camino, lobos marinos se lanzan al agua desde islotes rocosos y, bajo el mar, arrecifes de coral atraen pargos amarillos. No es difícil encontrar en estas aguas rayas gigantes o tiburones ballena
En el islote conocido como "La Lobera", parte del archipiélago de Espíritu Santo, reside una colonia de lobos marinos. La riqueza biológica de este golfo llevó a Jacques Cousteau a bautizarlo como "el gran acuario del mundo".Teresa de MiguelBallenas piloto en las aguas del golfo. Aquí se encuentran importantes concentraciones de múltiples especies de ballena que residen todo el año o lo visitan estacionalmente, como la azul, la jorobada o el cachalote.Teresa de MiguelSi bien la riqueza biológica del golfo de California es indiscutible, cada vez se encuentra más en riesgo debido al efecto de las actividades humanas, particularmente la sobrepesca.Teresa de MiguelUn lobo marino sobre un islote frente a la isla de San José.Teresa de MiguelLa pesca industrial y el uso extensivo de redes de arrastre han ido afectando las poblaciones de tiburones y rayas, así como de especies endémicas como la totoaba o la vaquita marina. Teresa de MiguelAnte la drástica disminución de peces comerciales, pescadores de una decena de pequeñas comunidades de Baja California Sur se unieron para crear la primera red de zonas de refugio de México.Teresa de MiguelDesde 2012 acordaron dejar de pescar en ciertas áreas de especial importancia para la reproducción de las especies.Teresa de MiguelCada año, un grupo de científicos y pescadores de la zona viajan a bordo de un barco durante diez días para evaluar el progreso de las áreas de refugio.Teresa de MiguelLos pescadores comunitarios han sido capacitados para seguir las metodologías científicas aprobadas por las autoridades mexicanas para monitorear la evolución de las áreas cerradas a la pesca.Teresa de MiguelDos pescadores comunitarios en una de las zonas de refugio del golfo de California, antes de sumergirse para realizar un censo submarino.Teresa de MiguelDesde que se establecieron en 2012, el tamaño y la cantidad de peces que se encuentran en las zonas de refugio ha aumentado un 30%.Teresa de MiguelPero para que las zonas de refugio funcionen tienen que ser respetadas. Y en una extensión tan amplia de territorio, las labores de vigilancia se complican.Teresa de Miguel